Madera maciza vs. MDF: ¿Cuál es la diferencia y por qué importa?

A la hora de elegir un mueble es inevitable dejarse llevar por la estética y lo que está en tendencia, pero hay algo que muchas veces pasa desapercibido y marca una gran diferencia: el tipo de material con el que está hecho. Este detalle es lo que marca la diferencia entre tener un objeto que fue producido en tiempo record para cubrir una necesidad momentánea (al estilo del fast fashion) o un objeto que fue diseñado, pensado y construído siguiendo un proceso consciente y cuidado en contacto con materiales naturales.
Hoy te contamos la diferencia entre madera maciza y MDF, para que puedas tomar decisiones más conscientes y duraderas.

¿Qué es la madera maciza?

La madera maciza es, básicamente, madera real, tal como viene del árbol, sin procesos de aglomerado ni químicos. Es el material que más usamos en YŪGEN porque tiene una belleza natural, es resistente, y envejece de forma elegante con el paso del tiempo.

Cada veta, cada nudo, cuenta una historia. Y más allá de lo estético, es un material noble, fuerte y duradero, ideal para muebles que querés que te acompañen por años (o generaciones), y la diferencia no solo se ve, sino que se siente.

¿Y el MDF?

El MDF (Medium Density Fibreboard o tablero de fibra de densidad media) es un material industrial, hecho con fibras de madera compactadas con resinas y adhesivos. Es más económico, más fácil de trabajar en masa, pero también más frágil, sensible a la humedad y difícil de reparar si se daña.

¿Por qué importa esta diferencia?

Porque no es lo mismo comprar un mueble que está pensado para durar, que uno que fue diseñado para ser reemplazado a corto plazo.
En YŪGEN elegimos trabajar con madera maciza porque creemos en lo artesanal, en lo atemporal y en la conexión con los materiales naturales.
Un mueble bien hecho no es solo un objeto: es parte de tu vida.

A modo de resumen:

Elegí consciente. Elegí lo que perdura. Elegí YŪGEN.